Los códigos QR son una forma rápida y segura de ofrecer información a los consumidores, ya que permiten a los usuarios escanear códigos en menos de un segundo utilizando su teléfono móvil. Una vez escaneados, los códigos permiten acceder a datos que además de ser de utilidad para el consumidor final, mejoran el sistema de trazabilidad del producto. Esta herramienta aporta transparencia en cuanto a la elaboración y características nutricionales, pero también contribuye a evitar la comercialización de licores falsificados que ponen en grave riesgo la salud de los consumidores.

José Antonio Pousa, Fundador de la empresa gallega Licores Pousa, se planteó en 2019 aprovechar este código para facilitar datos de valor a sus clientes y contribuir a mejorar la seguridad alimentaria del sector. Dicho y hecho. Desde el pasado mes de diciembre el código ya se puede ver serigrafiado en las botellas de Licor Café, Licor de Hierbas y Crema de Licor de la marca Pousa.

“Los consumidores son cada vez más exigentes; quieren conocer el proceso de elaboración  de los licores, si se han utilizado edulcorantes artificiales, cuántas calorías contiene una bebida y los datos sobre sostenibilidad o emisiones de carbono. Como no hay espacio para incluir toda esta información en una botella, el código QR resulta especialmente útil para dar solución a esta necesidad informativa”, indica Pousa.

Y es que el envase del licor en sí mismo es una gran herramienta de marketing. Hasta ahora las marcas invertían muchos recursos en trabajar el diseño de su imagen corporativa y el formato de sus envases, pero se han dado cuenta de que, además de estos aspectos, es necesario poner...

Artículo completo en Revista Alimentaria 512

Infórmate aquí sobre cómo puedes suscribirte y enterarte de todo.

Quizá te interese ver estas noticias relacionadas:

•  Sorbos sostenibles
• Nuestro comité opina: innovación en el sector enológico