Estas son las cinco claves con las que entenderás por qué elegir el café de especialidad
El sistema de puntuación de la SCA considera que a partir de 80 puntos tenemos un café de especialidad
El café de especialidad se ha convertido en el gran deseado de los últimos años. Todo amante de esta bebida busca poder beber una taza de un buen café, pero ¿cuál es realmente el valor añadido del café de especialidad con respecto al café tradicional, también denominado Commodity Coffee?
En primer lugar, la mayor diferencia que percibimos como consumidores está en el perfil de taza, el sabor y los matices que podemos apreciar en el café de especialidad, que son, básicamente, incomparables. Pero ¿cómo hacemos para medir “objetivamente” estos sabores?
Con esta finalidad se creó en 1984 el sistema de evaluación del café SCA (Specialty Coffee Association). Esta escala de valores puntúa el café en un rango que va desde el 0 al 100. A partir de los 80 puntos, un café ya se considera café de especialidad. Esta escala de valores trata de determinar la calidad de los granos en verde, es decir, crudos, así como el perfil sensorial del café en taza. “En este examen del café existen 10 categorías, de las cuales tres están diseñadas para identificar lotes defectuosos. Las otras siete categorías están orientadas a la calidad del café y evalúan los siguientes parámetros: aroma, sabor, acidez, aftertaste, cuerpo, equilibrio y la suma de todos estos aspectos”, explica Rodrigo Moreiras, Head of Coffee de Syra Coffee.
Para conseguir estos 80 puntos hace falta un trabajo en conjunto con todos los eslabones que conforman la cadena de valor del café. Por lo que, ¿qué factores determinan entonces la diferencia entre café de especialidad y café comercial? Syra Coffee, marca que trabaja bajo la máxima de democratizar el café de especialidad, nos da las cinco claves para comprender la razón del éxito del Specialty Coffee:
- El origen: La procedencia es una de las claves que marcan la diferencia entre ambas tipologías del café. En este factor contribuyen aspectos como la elección de la zona y varietal en función de las condiciones climáticas y composición de la tierra, el cuidado y la manutención de los árboles a lo largo de todo el año -podas, fertilización, prevención de plagas y enfermedades, así como el uso de químicos en estos procesos o no-, una recolección minuciosa del fruto solamente cuando este está maduro y, por supuesto, el control estricto en el procesado del grano y posterior secado, hasta que alcanza una humedad determinada dentro del grano.
- Almacenamiento: Otro de los factores vitales en la obtención de un café de especialidad es el almacenaje y envío en determinadas condiciones. El café de especialidad se coloca en una doble bolsa. La bolsa interior es de un plástico que ayuda a mantener el café fresco más tiempo. Incluso algunos micro lotes se envasan al vacío. Una vez en los países de destino se debe almacenar en condiciones de humedad y temperatura determinadas, sin exposición a luz solar ni olores fuertes.
- Trazabilidad: Un punto diferencial para el alcance de estos 80 puntos es la trazabilidad, y para Syra Coffee el más importante. Conocer en profundidad los procesos, varietales, fincas, zonas de cultivo, el tipo de grano, altitud de la finca y las personas que están detrás del cultivo del café seleccionado. Una de las máximas de Syra Coffee es conocer en profundidad a las familias de caficultores, estableciendo relaciones a largo plazo o mostrando su apoyo a los diferentes proyectos sociales en los que se hayan involucrado.