Extracto del artículo publicado en Revista Alimentaria nº 455. Autora: Jana Sendino Miguel

El aceite de palma está presente en la mitad de los productos de nuestros supermercados (aperitivos, bollería, pastelería, cosmética, productos de limpieza, biocombustibles…), dentro del concepto de “aceites vegetales”.

Hasta finales de 2014 los fabricantes de la UE no tienen la obligación de detallar el origen específico de la grasa vegetal que emplean en sus productos.

Este aceite procede de países asiáticos en su mayoría, como Indonesia y Malasia, que entre ambos suponen el 85% de la producción mundial; siendo estos lugares los que sufren el fuerte impacto ambiental y social que supone la deforestación, la extinción de especies y el fomento de condiciones laborales dudosas.

La dificultad de las industrias en sustituir este aceite por otra materia igual de económica y versátil; la creciente valoración de la sostenibilidad por parte...

Toda la información en Revista Alimentaria nº 455