¿Por qué las fresas nos ayudan a mantener un buen estado de salud?

CEU

15 de octubre, 2018


 

Equipo Biotecnología de la Interacción Planta-Microbioma (Ana García-Villaraco, Enrique Gutiérrez-Albanchez, Fco Javier Gutiérrez-Mañero, José Antonio Lucas-García y Beatriz Ramos-Solano.

www.biotecnologia-rizosfera-ceu.com

 

El hecho de llevar una alimentación sana y equilibrada se ha convertido actualmente en una de las preocupaciones más importantes en los países desarrollados. Hoy día, ya no hay duda de que consumir determinados alimentos repercute decisivamente en el estado de salud de los individuos y, por tanto, en un mayor estado de bienestar de la sociedad. Los alimentos nos proporcionan nutrientes y energía necesaria para mantener nuestras estructuras vitales en funcionamiento. Sin embargo, hay muchos alimentos que además de aportar esos nutrientes nos proporcionan moléculas que pueden disminuir la aparición de determinados problemas de salud. Esos alimentos se denominan alimentos funcionales, y las moléculas que nos protegen, bioactivos.

Sabemos que estos compuestos bioactivos pertenecen a un conjunto de moléculas conocidas como metabolitos secundarios. Las plantas son organismos sésiles, es decir, no pueden moverse y han desarrollado el metabolismo secundario orientado a mejorar su adaptación a condiciones ambientales adversas (estrés abiótico) y a su defensa frente estrés biótico, patógenos, insectos, herbívoros… Al ser un metabolismo de adaptación, es altamente inducible y el proceso por el cual se induce la biosíntesis de metabolitos mediante exposición de las plantas a moléculas capaces de causarle una situación de estrés se denomina elicitación. En general, los elicitores pueden clasificarse en base a su “naturaleza” como elicitores bióticos o abióticos. Los elicitores bióticos son sustancias de origen biológico, de distinta naturaleza química (García-Seco et al., 2015). Así pues, la aplicación de bacterias beneficiosas o sus elicitores, como inductores del metabolismo secundario de las plantas, se presenta como una herramienta biotecnológica de gran interés y con un enorme potencial para la industria agroalimentaria y farmacéutica (García-Villaraco et al., 2011).

Las enfermedades neurodegenerativas y enfermedades crónicas, como la enfermedad cardiovascular, cáncer, diabetes tipo II o la obesidad, se han convertido en un grave problema de nuestra sociedad, y el principal factor de riesgo es la edad junto con la alimentación y hábitos de vida. Hoy sabemos que la incidencia de estas enfermedades se puede retrasar o incluso se puede mejorar su sintomatología, mediante una serie de hábitos entre los que se encuentra una alimentación equilibrada y rica en productos de origen vegetal de alta calidad (Martin et al., 2013; Lin et al., 2016).

Concretamente, los llamados frutos del bosque (arándanos, moras, frambuesas y fresas entre otros), con un alto contenido en polifenoles, están demostrando efectos protectores en el desarrollo de las enfermedades antes mencionadas (Baby et al., 2017). Esta es la razón por la que a este tipo de cultivos...

 

Twitter: @RevistaAlimenta

Facebook: Revista Alimentaria

Artículo completo publicado en Revista Alimentaria 497

Infórmate aquí sobre cómo puedes suscribirte y enterarte de todo:

http://www.revistaalimentaria.es/suscripciones.php


Puedes seguirnos


Te Recomendamos


Suscríbete a nuestra revista

Suscripción a 10 números consecutivos de la Revista Alimentaria desde la fecha de la suscripción

portada revista alimentaria Más información

Aviso de Cookies

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar la experiencia del usuario a través de su navegación. Si continúas navegando aceptas su uso.Política de Cookies.



Saber más