Calidad Pascual ha inaugurado un nueva planta embotelladora de Bezoya en Ortigosa del Monte (Segovia) con una superficie construida de 15.000 metros cuadrados, lo que supondrá un incremento en la producción de un 10%. Los principales ejes bajo los que se ha concebido la nueva fábrica son: calidad, sostenibilidad y respeto al medioambiente, con la máxima eficiencia energética.

El acto de inauguración estuvo a cargo del presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera; y el presidente de Calidad Pascual, Tomás Pascual Gómez-Cuétara. En el mismo, también estuvieron presentes Silvia Clemente, presidenta de las Cortes de Castilla y León; Milagros Marcos, consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta; Francisco Javier Vázquez, presidente de la Diputación de Segovia; Francisco Javier López-Escobar, delegado de la Junta de Castilla y León en Segovia; y Juan Carlos Cabrejas, alcade de Ortigosa de Monte, entres otras autoridades.

Juan Vicente Herrera, presidente de la Junta de Castilla y León, recordó al fundador de la compañía arandina Don Tomás Pascual Sanz como "un paisano, un empresario de leyenda de quien tuve la suerte de aprender de su ingenio y capacidad de emprender". Y agradeció a la familia Pascual su apuesta "por la tierra".

Por su lado, Tomás Pascual, presidente de Calidad Pascual, indicó que "esta nueva fábrica se enmarca dentro de la nuestro objetivo de ser líderes en hidratación saludables y nos permitirá asegurar el abastecimiento del mercado. Inauguramos una de las plantas más punteras ambiental e industrialmene. Es una opción de consumo e hidratación respetuosa con el medio ambiente. Bezoya ha experimentado un crecimiento constante y saneado en los últimos años y queremos seguir en esa línea".

En su apuesta por el respeto por el medio ambiente, las nuevas instalaciones se han edificado bajo el sello LEED, lo que garantiza que el dieseño arquitectónico, las instalaciones y la obra siguen estrictos parámetros de sostenibilidad, de forma que se minima el impacto medio ambiental durante todo su ciclo de vida. En su compromiso ambiental, la nueva fábrica contará también con sistemas para monitorizar y reducir el consumo energético y de agua.

Bezoya es una agua de mineralización muy débil, cuenta con un muy bajo residuo seco (28 mg/l). El agua es captada de la Sierra de Guadarrama, ubicada en la provincia de Segovia. El único tratamiento que recibe el agua es su filtración para eliminar las párticulas sólidas que pueda arrastrar.

Las ventas de agua embotellada en España crecieron en volumen un 4,9% en 2016, y en 2017 las ventas de agua mineral alcanzaron un incremento del 8,1% vs año anterior. Cada vez son más los hogares que consumen agua embotellada, alcanzado el 81% de la tasa de penetración en España. Según la consultora Mintel, la tendencia en este mercado continuará creciendo a un ritmo de un 9% a 2020.

Para satisfacer esta tendencia, la compañía ha instalado en su nueva planta de Ortigosa del Monte dos nuevas líneas de producción, sustituyendo las antiguas por otras más modernas, en las que se embotellará su agua mineral natural en formato PET de 1,5 L y de 5 L.

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