La Comisión Europea ha expuesto una serie de medidas encaminadas a poner la inteligencia artificial (IA) al servicio de los ciudadanos europeos e impulsar la competitividad de Europa en este campo. La Comisión propone un triple enfoque que refuerce la inversión pública y privada en IA, anticipe los cambios socioeconómicos y garantice un marco ético y jurídico adecuado. Esta iniciativa da respuesta a la solicitud de los líderes europeos de un enfoque europeo en materia de IA.

Como respuesta a este anuncio, Christian Verschueren, Director General de la patronal europea del sector de la distribución, EuroCommerce, ha manifestado su apoyo al objetivo de la Comisión de "liderar la identificación y selección de los retos principales de la IA". El Director General ha señalado que "la tecnología digital está cambiando cómo vivimos y cómo consumimos bienes y servicios. La Inteligencia Artificial será una herramienta poderosa para avanzar en estas áreas, y crea un enorme potencial para el desarrollo de la economía mundial. También generará profundas cuestiones a nivel político".

En cuanto a la influencia que está teniendo la IA en el sector de distribución y de comercio, Verschueren ha señalado que ya está teniendo un impacto fundamental: "Algunos distribuidores ya han desarrollado productos innovadores que utilizan el aprendizaje automático y transforman la manera en la que los consumidores buscan, compran y participan online. En el futuro, la IA será crucial para comprender mejor las necesidades de los consumidores, crear los servicios que realmente quieren y hacer que las ventas online y offline sean incluso más fluidas. También revolucionará la gestión del inventario y de la cadena de suministro, la logística, las entregas, los pagos y muchos otros procesos. Las posibilidades son infinitas y esto solo es el comienzo".

En cuanto a inversión, la Comisión ha señalado que la UE (sectores público y privado) debe incrementar las inversiones en investigación e innovación sobre IA en al menos 20.000 millones de euros de aquí a finales de 2020. Para apoyar estos esfuerzos, la Comisión va a aumentar su inversión hasta 1.500 millones de euros para el periodo 2018-2020 en el marco del programa de investigación e innovación Horizonte 2020. Se espera que esta inversión genere fondos adicionales de 2.500 millones de euros procedentes de las asociaciones público-privadas existentes, por ejemplo, sobre macrodatos y robótica. Se respaldará el desarrollo de la IA en sectores clave, desde el transporte a la sanidad, se conectarán y reforzarán los centros de investigación sobre IA en toda Europa y se fomentarán los ensayos y la experimentación. La Comisión apoyará también el desarrollo de una «plataforma de IA a la carta» que brindará a todos los usuarios un acceso a los recursos de IA pertinentes en la UE.

En el caso de los cambios socioeconómicos, la Comisión resalta que con la llegada de la inteligencia artificial se crearán numerosos puestos de trabajo, pero otros desaparecerán y la mayoría sufrirá transformaciones. Por este motivo, la Comisión insta a los Estados miembros a modernizar sus sistemas de educación y formación y facilitar las transiciones en el mercado laboral apoyándose en el pilar europeo de derechos sociales.

En cuanto a los problemas de carácter ético y jurídico que pueden surgir, la Comisión presentará unas directrices éticas sobre el desarrollo de la IA para finales de 2018, sobre la base de la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE.

A partir de hoy, y tras la Declaración de cooperación firmada por veinticuatro Estados miembros y Noruega el 10 de abril de 2018, la Comisión empezará a colaborar con los Estados miembros para disponer de un plan coordinado sobre IA para finales de año.

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