^{ASOPROVAC (Asociación Española de Productores de Vacuno de Carne)}

El proyecto LIFE BEEF CARBON es una iniciativa europea que se desarrollará durante el periodo 2015-2020, enmarcado dentro del programa LIFE, instrumento financiero de la Unión Europea dedicado, de forma exclusiva, al medio ambiente. Representa un plan de acción del sector vacuno de carne para reducir un 15% su huella de carbono en los próximos 10 años, de manera integral y coordinada con toda una serie de indicadores medioambientales (calidad del agua, aire, biodiversidad) así como económicos y sociales.

El proyecto está liderado por ASOPROVAC en España y coordinado por el Institut de l’Elevage a nivel europeo e implica en total a cuatro países productores de carne de vacuno: Francia, Italia, Irlanda y España, que representan en torno al 32% de la producción europea.

La idea es obtener un observatorio nacional y europeo de emisiones de CO₂ a través de la incorporación de granjas de vacuno de carne repartidas entre los cuatro países. En el caso de España englobamos principalmente cuatro regiones: Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura y País Vasco. Nuestro objetivo es analizar los diferentes sistemas de producción españoles así como los tipos de alimentación más habituales con el fin de obtener referencias de emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) para el vacuno de carne español. 

Matilde Moro, Directora Técnica de ASOPROVAC y responsable del proyecto en España, explica: “Beef Carbon representa una solución colectiva aportada por el sector de vacuno de carne frente al cambio climático. Este programa permitirá objetivar las prácticas y estudiar detalladamente las vías de mejora más adecuadas y eficaces. Para llevarse a cabo, contamos con 2.000 granjas demostrativas, de las cuales 120 son españolas y 170 innovadoras, entre las que se encuentran 15 españolas, que deberán ser auditadas con la ayuda de una herramienta denominada BOVIDCO2. Esta herramienta -que hemos puesto a punto en el marco del proyecto- permitirá a los ganaderos situarse respecto a una serie de referencias, simular el efecto de nuevas prácticas y evaluar sus contribuciones positivas (fijación de carbono, autonomía alimentaria…)”.

Estamos empezando a realizar las visitas en granja, por el momento nos estamos centrando en las granjas innovadoras. Realizamos una recogida de datos sobre los censos, alimentación, maquinaria, manejo del estiércol, superficies destinadas a la alimentación animal, datos productivos… Como era de esperar la fermentación entérica y la gestión de los estiércoles son los puestos que más influyen en las emisiones. En cambio, los datos relativos a las contribuciones positivas como la fijación de carbono en suelos o setos o el mantenimiento de la biodiversidad, todavía están en desarrollo ya que...

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Publicado en Revista Alimentaria 493

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