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La Estación Experimental Agraria de Elche (Servicio de Transferencia de Tecnología) celebra hoy la quinta edición de la Jornada Técnica sobre el Cultivo de la Alcachofa. En ella sus investigadores agroalimentarios tratarán de dar respuesta a la preocupación existente entre los agricultores acerca de la calidad del suelo y de la escasez de agua para la producción de esta verdura.
La Jornada cuenta con la participación de Joaquín Parra, técnico en Investigación y Desarrollo del centro organizador, que presentará los ensayos realizados sobre las alcachofas que se multiplican por semilla como la calicó y su variedad híbrida, la Sambo, de similares características a la Blanca de Tudela. También mostrará los avances en la aplicación de ácido gibélico en el alcaucil de semilla calicó que se destina a Francia, utilizado para “acelerar la precocidad de su cultivo y que pueda llegar antes al país”, tal y como explica Parra.
Agricultores y entidades agrícolas como la Asociación Alcachofa de España y la Asociación Alcachofa de la Vega Baja expondrán en un coloquio sobre necesidades en I+D+i del sector sus preocupaciones con respecto al agotamiento del campo, la fertilidad de los suelos y el gasto del agua, ya que “no suele haber y cuando la hay es cara”, según Antonio Galindo, presidente de Alcachofa de España. También se interesarán por los estudios recientes sobre cultivos que no necesitan tanta cantidad de agua.
La jornada se desarrolla en la Vega Baja del Segura, una de las zonas más importantes del país en cuanto a alcachofa de semilla y una de las principales exportadoras de alcaucil fuera de España. Además, se trata del cultivo más tradicional de la comarca, reconocido por su gran calidad y por generar gran cantidad de puestos de trabajo.
“Es importante que se siga fomentando que se coma alcachofa en España para que no solo sea un importante país exportador, sino también consumidor. Para ello, hay que buscar formas fáciles de tomarla, no solo en lata o en conserva, y que, con ello, no le dé a la gente pereza cocinarla”, destaca el técnico de la Estación Experimental Agraria de Elche, que anima a que se lleve a los colegios y a los cursos gastronómicos para que se conozca también por “su rico sabor, sus grandes propiedades saludables y su enorme poder saciante”.
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